El dolor en los tiempos del CoVid. ¿Cómo no jugar con este título?
Si las emergencias dentales nunca son oportunas, las medidas de prevención no mejoran las cosas. Al contrario, el dolor en los dientes cuando hay medidas sanitarias puede plantear dudas sobre la conveniencia de ir al dentista.
No debería. Los problemas dentales escalan rápidamente, y no es buena idea esperar. Entre otras cosas, porque nadie sabe cuánto durará la situación actual.
Urgencias: ni el virus es excusa
El dolor en tiempos del Covid requiere la misma atención que en cualquier otro momento: ir al dentista durante el confinamiento está permitido cuando se trata de urgencias.
Durante el confinamiento, por motivos de seguridad sanitaria, no podíamos hacer limpiezas dentales o tratamientos estéticos, pero las emergencias dentales eran un servicio esencial, y no dejamos de atenderlas.
Además:
- Cumplimos estrictas medidas de prevención en cuanto a esterilización de los espacios y materiales.
- Ofrecemos citas de entre una hora y una hora y media para garantizar la intervención adecuada y el bienestar del paciente.
- Reducimos los tiempos de espera con una planificación minuciosa de horarios.
- Nuestras citas tienen por objetivo la resolución del problema, no la eliminación de los síntomas.
- Redoblamos el cuidado con el paciente para aumentar su tranquilidad en tiempos inciertos.
¿Y cuándo hay que ir?
Identificar una urgencia no es difícil. Lo normal es que nada duela. Y si duele, es que algo pasa. Cada persona conoce su boca, sus límites y necesidades. Si te lo panteas, ve.
Aquí tienes algunas de las situaciones en las que lo mejor que puedes hacer es acudir a urgencias.
- Si tienes algún tratamiento en curso. Cualquier complicación debe ser tratada inmediatamente para minimizar el daño, el dolor y las consecuencias. Aunque sea domingo.
- Si sufres algún accidente doméstico. Las medidas sanitarias han reducido el ritmos y muchos movimientos, pero eso no elimina la posibilidad de sufrir un accidente, sea en casa o en la vía pública.
- Cuando una pequeña molestia perdura en el tiempo. No todas las urgencias empiezan con dolores agudos. Es más, el dolor dental es tan delicado que uno mismo está atento a su evolución. Si ignoras una molestia es cuestión de tiempo que se convierta en una urgencia.
- Dolores crecientes. Un dolor que aumenta es un billete de ida a urgencias. Especialmente porque un aumento rápido del dolor es síntoma de que un problema es grave y necesita atención urgente. Las emergencias dentales no avisan.
Automedicación, la justa.
Las urgencias nunca son oportunas. Lo decimos cada día.
Es normal tomar algún medicamento para paliar puntualmente un dolor leve o recién aparecido. Sin embargo, prolongar su uso tiene un efecto doblemente negativo, y puede retrasar o hacer más difícil el tratamiento necesario.
- Reducen el dolor solo unas horas sin detener la escalada del problema de base.
- El desconocimiento de las dosis adecuadas, o de la duración del tratamiento le quita efectividad a los medicamentos.
- Puedes desarrollar tolerancia y necesitar dosis superiores para lograr el mismo efecto, aumentando el riesgo de efectos secundarios.
- Intervenciones más invasivas por el agravamiento del problema original, o por un efecto reducido de los medicamentos o la anestesia.
¿Puede esperar?
Es importante salir de dudas rápido. Si tienes alguna molestia, o ha aparecido alguna sensación extraña en tu boca, llámanos. Anticiparte a un problema más serio hará que los procedimientos sean más suaves y menos invasivos.
Por lo pronto, puedes prevenir:
- Mantén una buena higiene bucal, y frenarás el avance de dolencias que no se hayan manifestado.
- Cuida tu alimentación, especialmente si sabes que hay algún problema. Evita los azúcares y ganarás tiempo.
Si tienes dolor en los tiempos del Covid, somos la única clínica dental con servicio de urgencias 24h en Valencia. Estamos preparados para atender cualquier eventualidad, siempre fieles a nuestra filosofía: transparencia, confianza y dedicación absoluta.
Sonríe de alivio. Te esperamos.
